Ese hombre agonizaba en su propia tristeza , en esa vieja cama rodeada de libros y de papeles . Nunca fue exitoso y jamás conocio el amor verdadero . Durante años trabajo como fiera para escapar de la maldita pobreza que lo agobiaba desde su nacimiento , en un lejano pueblo perdido en los mapas . Siempre lucho por tener una vida distinta pero la señora de la higuera se le ponía siempre por delante . Una vez soño que volaba alto sobre las montañas , los mares , los ríos y que podia conversar con Dios y este le decía : Volveras a nacer hermoso y fuerte en otra vida . Los años pasaron con su carga de tristeza , desamor , pobreza . Siempre alimentaba la esperanza blanca en las fiestas navideñas , de que todo podria ser diferente en su vida . Preparaba la cena y barria el piso de su casa miserable . Las bolsas de té desfallecida en la mesa , el pan escaso y la cocina deslucida . Un pequeño árbol de navidad con los adornos que el mismo fabricaba y la bolsita del viejo pascuero con algunos dulces para regalarselo a los niños del pasaje . Esa vispera de navidad sintio que su corazón latia con fuerza , que se le agotaban las fuerzas y sudaba mucho . Presentía que la muerte estaba cercana en la orilla de su camastro . Él rogaba a Dios por un aliento de vida y esperanza , presentia que todavia la vida le podria dar una gran oportunidad , y solamente necesitaba un poco de fuerza . Agonizando veia todas sus navidades , que a pesar de la pobreza , siempre estaba presente la imagen de ese pesebre , con ese ser luminoso llamado Jesús , como un pequeño faro de esperanza dentro de la falta de oportunidades . De pronto su corazón se calmo y vio que los hojas amarillas de sus libros estallaban sobre los vidrios y cayó en un sueño profundo . La señora de la muerte dejo de jalarle los cabellos y ese pequeño árbol de navidad se volvió mas hermoso y deslumbrante como si fuese la navidad mas opulenta . La sencilla cena todavia se guardaba en el horno y las botellas de vino aparecieron como arte de magia . Ese hombre se levanto de su cama y invoco a la esperanza en la caja de pandora . La fiebre había pasado . Dios le entrego una pequeña llave para abrir la puerta de la conquista de la esquiva felicidad . Escucho el canto de los villancicos y bebio un poco de vino . En la mañana de navidad recibió una carta con un impresionante timbre de un país lejano . La diosa de la fortuna se hastió de sus lamentos y le entrego su carta de liberación de escapar de la horrible pobreza . Recorrio lugares increibles y volvio a sonreir con las mejores cenas . Pasaron muchas navidades y aun conservaba ese pequeño árbol con esos adornos simples que construia con sus propias manos .
