domingo, 26 de septiembre de 2010

UNA CASA EN EL ÁRBOL DE MARIETTA MORALES RODRÍGUEZ .



Que decisión mas difícil y dolorosa , pero la vida es así . una secuencia de momentos gratos y dolorosos . He tenido unos días complicados y el corazón a punto de entrar en el quirófano . Debería aplicar mas el sentido de contemplación y irme un fin de semana al desierto y dormir bajo una bóveda de estrellas . En el fondo lo deseo tanto , si lo deseo tanto , pero si doy rienda suelta , caigo en un carrusel de amarguras , celos , envidias , invasión nuevamente a mi privacidad y una condena hacia mi persona . Terminaria humillada , trasquilada , y con las cicatrices de las burlas en mi espalda . Cuando alguien tiene una casa en el árbol , un jardín de flores , uno no entra en esa casa en el árbol . Aunque esa vértebra , corazón y mente , desea que pase como un rayo por su casa , en la cercanía de los llantos de los ríos y con pequeña cruz de dolor . A veces sueño que llegue ese momento , y que en casa en el árbol , exista un espacio vació en la mesa , pero no es posible . Uno respira en la soledad del desierto , para no caer en pena o malos sentimientos . Espantar la escoba de esa bruja , que te dice : Anda entra a esa casa y golpea fuerte el rostro de esa mujer , que alimenta tu tristeza día a día . A esa bruja le respondo : No es lo correcto y solamente espero que llegue otro hombre con un baúl de joyas y oro , y se la lleve lejos , muy lejos , ojala en la cercanía de la muralla china , y esa mujer termine siendo una reina en el país del oriente . La bruja maldita , me desafía y me obliga a tomar la escoba . Tengo la escoba en mi manos , y tejiendo una mantilla de dolor y esperanza . Me gustaría quemar esa escoba y que esa futura emperatriz tome rumbos hacia otros reinos y yo subir en la casa en el árbol , con una brújula , una botella de vino y unos poemas llenos de esperanzas , y esa bruja maldita me deje de hostigar .