lunes, 23 de agosto de 2010

UN FRIO INVIERNO DE MARIETTA MORALES RODRÍGUEZ .




Pasé un frío invierno en un pueblo cercano al desierto .
Pero un día llovió , llovió , demasiado .
Era algo surrealista .
Viajaba al desierto a cazar alacranes .

Solía viajar en el amanecer
donde no había un espíritu en los arenales
y desparramaba en el frío del silencio ,
en la línea horizontal del fuego .
Con mi cercanía en la ruta 5 ,
se levantaban los naranjos ,
sobre el universo se veían los otros planetas ,
en la frialdad de ese día de lluvia .
Una vez en el centro del pueblo
solía correr con las naranjas .
El estruendo de las luciérnagas
giraban en círculos en una danza macabra .