martes, 12 de enero de 2010

UN TORRENTE DE AIRE Y FUEGO DE MARIETTA MORALES RODRÍGUEZ .


Siento un torrente de aire ,
el reflejo de una luz luciferina .
Es el canto de los cuervos en la noche de luna llena .
Es el viento que azota mi ventana
en el canto de San Cipriano .
En el cuerpo de un anciano enterrado
por el camino del desamor .
La doncella que teje la mantilla
del ritual de las arenas ensangrentadas .
Es sentir que las hormigas
dibujan el camino del convento abandonado
por el resplandor de una guerra sin fin .
Es el rostro de un corresponsal de guerra ,
en el hotel perdido entre palacios
de la historia perdidas entre jarrones .
Es la estatua que caen por los llantos de los niños .
Son los vientos que hacen girar las hierbas en mi jardín .
Son los aires , aires , aires de los fuegos de una post-guerra .
Siento que la historia recién comienza .