jueves, 28 de enero de 2010

LA CONDESA DELIRANTE DEL BOSQUE DE MARIETTA MORALES RODRÍGUEZ .


Fuiste la chica dorada de un club de ilusiones .
El mundo estallo con el compás de tu cabellera .
La princesa en su trono de cristal
en busca del canto de los gorriones lamentosos .
Tu voz hizo revolucionar tu línea de crédito .
El desfilar eterno de las luces de neón
en las calles de Los Ángeles , Nueva york y París .
Eres la sucesora de las rubias trágicas ,
en el brillo de tu mirada en el calendario .
Estaba ahí en las pantallas de los televisores .
Los chicos tenían tu foto en los casilleros .
Los soldados en los campos de batalla .
Las chicas pronos de las noches del bosque sagrado .
Nadie hacia presagiar el momento donde la brújula perdió el norte .
Vallejo lo escribió - Yo nací un día en que Dios estuvo enfermo -
Los hijos llegaron como esas adorables accidente en tu vida .
El haragán de turno tomaba las monedas de oro ,
en el baño de los jacuzzi , los clubes privados y las brujas de turnos ,
en el baile frenético de un tablero de ajedrez .
Tu seguiste creyendo en la falsa ilusión del amor ,
esa estúpida esperanza del nunca jamás .
La pesa reventaba a pesar de tu belleza
y el brillo de tus ojos .
Esas malditas hamburguesas al compás de las Lohan y las Hilton ,
y fuiste la presa fácil de los cazadores del corazón de Fellini .
La maldita dolce vita .
Los iconos de las iglesias del planeta exploto como los llantos del túnel del alma ,
y tú la otra princesa de las fiestas alocadas ,
las fotos sin panty
y los retrasos en los tribunales .
La princesa busca su propia muerte ,
en el brillo de las cámaras de tu cabeza calva .
Fue el sino de esa abuela que marco el territorio en el cementerio .
Dame más grita la canción de despedida de la radio ,
con el baile de una bailarina nudista asesina en Las Vegas .
Vas en el camino de los blog
como el acto de tu propia muerte
alimentando a esas aves de rapiña ,
que espera el momento en que tu sangre aumente la bolsa
de valores de los millones de dólares ,
de los vuelos de las arpías .
El dolor sube la cuenta bancaria de ese paparazzi islámico ,
que esta haciendo el mejor negocio de su vid
y te hace abrazar el corán que revienta
en los vidrios de un sanatorio ,
donde los versos de un poeta maldito ,
escribe su mejor obra .