lunes, 21 de septiembre de 2009

UN VIEJO BARRIO DE MARIETTA MORALES RODRÌGUEZ .



Un viejo barrio
es como el rostro de la vida y la muerte .
Esta presente en el mapa de las hojas de las rutas .
Con sus calles polvorientas ,
en el caminar de los perros paupérrimos
y el rostro de la miseria
en los cabellos como pajas amarillentas .
La belleza huye despavorida
como una doncella frente a un demonio .
No entra el estruendo de la poesía ,
solamente la gran mancha de la pobreza ,
con sus casas deslucidas ,
con la entrada de la muerte ,
como esa señora alada
sobre el mantel blanco desteñido .
Los perros como guardianes del higo seco ,
dominan las calles de la miseria .
El viejo barrio
es como un circo de fenómenos ,
con mujeres barbudas ,
enanos deformes ,
encantadores de serpientes
y domadores de fieras .
Los números de las casas
se caen frente al torrente de deuda ,
con sus portones como pequeños feudos .
El viejo barrio
es como una prostituta en decadencia ,
con los dientes quebrados
por mascar la nuez de la ignorancia .
Con el cuerpo llenos de cicatrices ,
y el rostro deformado por la falta de belleza .
El viejo barrio
es el castigo de los dioses del Olimpo .